30 de octubre de 2012

Ruta de las Minas PRC-LE 60

 
Las fotografías de está ruta han sido realizadas por Luis C. Cela Torbado
 
Características de la ruta:
  • Tipo de recorrido: Circular
  • Longitud: 9,8 km
  • Duración: 3 horas aproximadamente
  • Desnivel: 217 m
  • Uso recomendado: Peatonal y ciclista
  • Dificultad: Baja
  • Época recomendada: Todo el año


Mapa de la ruta

Perfil de la ruta
Descripción de la ruta:
 
   Comenzamos en la Plaza del Museo Regional de la Siderurgia y la Minería, desde donde ascenderemos hasta el barrio de San Blas para abandonar rápidamente el pueblo y llegar a la ermita que recibe el mismo nombre.
   A partir de este punto tomamos un camino que nos llevará hacia la Fuente de la Muela donde podremos recargar nuestras cantimploras. Continuamos ascendiendo progresivamente hasta llegar a un cruce de caminos en el cual deberemos de tomar el camino de la derecha. Justo en ese punto en el margen izquierdo del camino podemos observar los restos de la Mina de la Plata, llamada así porque el mineral que se buscaba era la galena argentífera (PbS), una de las principales menas de plomo de un característico brillo metalizado y cuyo contenido en plata puede alcanzar el 1%.
 
Plaza del Museo

Punto en el que comienza el camino y panel informativo de la Ermita de San Blas

Fuente de la Muela

Panel informativo de la Mina de La Plata

Galena recogida en la Mina de la Plata
   Continuamos por el camino de la derecha y a los pocos metros nos encontraremos con otro cruce con tres caminos en el que tenemos que continuar por el de la izquierda. Poco a poco nos vamos internando en un precioso robledal cuya principal especie es el rebollo (Quercus pyrenaica), aunque también crecen otras especies de robles como el quejigo (Quercus faginea) o el roble albar (Quercus petraea). Más adelante nos encontraremos con una explotación a cielo abierto para la obtención de carbón en la cual ya cesó la actividad hace bastantes años.
   Poco después dejamos la pista forestal para cambiar de valle y dirigirnos a un impresionante mirador, el Mirador de Las Águilas, desde donde se observa el río Esla a su paso por los pueblos de Aleje y Verdiago. De frente también veremos las espectaculares siluetas del Pico Roscas, Peña Rionda y Pico Moro. También es frecuente encontrarse con alguna rapaz como el buitre leonado (Gyps fulvus), el alimoche (Neophron percnopterus) o el busardo ratonero (Buteo buteo).
 
Camino que se interna en el robledal

Panel informativo de la explotación a cielo abierto

Restos de la explotación

Llegando al mirador

Mirador de Las Águilas

Verdiago

Panel informativo del mirador
   Próximas al mirador hallaremos un par de mesas donde los que lo necesiten podrán reponer fuerzas para afrontar lo que queda de ruta. Detrás de una de estas mesas veremos un cartel que nos indica que ahí se encontraba la Eglantine, y de cuya actividad solamente quedan los restos de una escombrera. Desde aquí comenzamos un pronunciado descenso por una senda bien marcada en el que debemos de extremar la precaución ya que aunque no sea peligroso hay épocas del año en las que resbala bastante. Poco antes de llegar a la altura del río Esla nos encontraremos con la Mina Mariate, perteneciente al empresario Domingo López y destinada a la extracción de carbón, y de la cual se pueden ver actualmente el derrumbe de la bocamina y la tolva, estructura ésta compuesta por la propia tolva y un dispositivo de vagonetas que transportaban el carbón mediante un cable aéreo de casi 500 m de longitud hasta el lavadero situado en la otra orilla del río.
   Ya a la altura del río veremos la Mina Imponderable, uno de los principales yacimientos de hierro que suministraban mineral a los altos hornos de la Ferrería de San Blas.
 
Lugar en el que se encontraba la Mina Eglantine

Derrumbe de la Mina Mariate

Restos de los postes de la mina

Vagoneta con el panel en el que se explica el funcionamiento de la mina

Tolva


Interior de la tolva

Mina Imponderable
   Continuamos nuestro camino por la orilla del río atrevesando un típico ecosistema fluvial, en el cual veremos árboles como fresnos (Fraxinus excelsior), chopos (Populus nigra) o sauces (Salix sp.) y en cuanto a fauna se refiere destacan las truchas (Salmo trutta), ranas (Pelophylax perezi), culebras de agua (Natrix maura), mirlos acuáticos (Cinclus cinclus), garzas (Ardea cinerea) y también nos podemos encontrar con alguna nutria (Lutra lutra). Poco antes de llegar a Alejico nos encontraremos con el puente colgante que cruza el Esla de Alejico a Aleje. Después de atravesar Alejico tomamos una nueva senda que va por la orilla del río aunque a los pocos metros tenemos que abandonar y continuar la ruta por la carretera, pasando por el paraje conocido como "la Playa de Sabero", desde donde continuamos hasta llegar a Sabero.
 
Otro lugar donde descansar

Puente colgante de Alejico

Llegando a Alejico

Senda que cogemos en Alejico

La Playa de Sabero


17 de octubre de 2012

Hongos de robledales y encinares

   En el Valle de Sabero el bosque predominante es el robledal, concretamente de la especie Quercus pyrenaica (rebollo o melojo). Ocupa más de las tres cuartas partes de la superficie arbolada del valle, por lo que es el lugar donde más especies micológicas podemos encontrar. Además del Quercus pyrenaica podemos encontrar otras dos especies de robles en nuestros robledales: el roble albar (Quercus petraea) y en menor medida el quejigo (Quercus faginea).
   En lo que a encinares se refiere, en nuestro valle solamente podemos encontrar uno, de la especie Quercus rotundifolia (encina carrasca) y su extensión no llega a las 30 hectáreas. También podemos encontrar bastantes zonas en las que abundan las encinas, pero sin llegar a formar un bosque propiamente dicho.
   En esta publicación me centrare sobre todo en las especies presentes en el robledal, ya que en el encinar que tenemos aquí no podemos encontrar demasiadas.

Ascomycetes:
Hymenoscyphus fructigenus
Otidea onotica
Peziza badioconfusa
Phragmobasidiomycetes:
Auricularia auricula-judae
Calocera cornea
Tremella mesenterica
Gasteromycetideae:
Astraeus hygrometricus
Lycoperdon perlatum

Aphyllophoromycetideae:
Cantharellus cibarius
Fistulina hepatica
Ganoderma lucidum
Laetiporus sulphureus
Macrotyphula juncea
Ramaria aurea
Stereum hirsutum

Trametes versicolor
   Boletales:
Boletus aereus
Boletus aestivalis
Boletus edulis
Boletus erythropus
Boletus luridus
Boletus regius
Boletus satanas
Xerocomus subtomentosus
Russulales:
Lactarius chrysorrheus
Lactarius quietus
Lactarius zonarius
Russula aurea
Russula cyanoxantha
Russula nigricans
Russula virescens
Amanitales:
Amanita caesarea
Amanita citrina
Amanita pantherina
Amanita phaloides
Amanita rubescens
Cortinariales:
Cortinarius orellanus
Cortinarius trivialis
Crepidotus variabilis
Hebeloma sinapizans
Entolomatales:
Entoloma sinatum
Tricholomatales:
Clitocybe gibba
Clitocybe odora

Collybia fusipes
Flammulina velutipes
Hohenbuehelia atrocaerulea
Marasmius epiphyllus
Mycena meliigena
Tricholoma columbetta
Tricholoma sejunctum
Tricholoma sulphureum

Tricholoma ustaloides