9 de octubre de 2013

Champiñones

Los champiñones son unas de las primeras setas en fructificar con la llegada de las lluvias otoñales. Pertenecen al género Agaricus y son bastante habituales en las praderas de nuestra comarca, aunque también sale alguno en nuestros bosques.
El género Agaricus es bastante complejo y muchas de sus especies son bastante difíciles de catalogar. Mi intención con esta entrada es daros a conocer las especies más frecuentes de nuestra comarca de una forma sencilla y remarcando las características que hacen posible su identificación.

Agaricus arvensis:

Este champiñón presenta un sombrero de 6 a 20 cm, carnoso, sedoso, blanco y con escamas apretadas y flocosas en torno al margen. La cutícula es separable y bastante gruesa. Las láminas son libres y apretadas; blancas cuando el anillo las recubre, rosa pálido a pardo sucio después, para terminar siendo de color marrón chocolate en su madurez. El pie es casi cilindrico, blanco tiñéndose de ocre al ser presionado y amarillo pálido en la base. Fistuloso al principio y hueco después. Su anillo tiene una rueda dentada muy desarrollada, persistente, amplio y doble. Tiene un olor anisado de joven y al ser recolectado, después desaparece.
Habita en terrenos abonados, prados, zonas herbosas y en márgenes de caminos. Crece aislado o formando grandes corros.
Es un excelente comestible de joven, aunque en estado adulto es conveniente quitar las láminas oscuras.

Agaricus campestris:

Tiene un sombrero algo más pequeño que el anterior, de 4 a 10 cm, sedoso fibriloso, blanco teñido de ocre al envejecer, con escamas pardas en la var. squamulosa o amarillas en la var. equestris. Margen estrecho y muy excedente. La cutícula es muy fácil de separar. Las láminas son libres, blancas, después de color rosa vivo de jóvenes, luego marrón oscuro y al final casi negras. Tiene un pie lleno y tenaz, de color blanco algo amarillento en la base. Su anillo es algodonoso, membranoso, simple, efímero y blanco; a veces permanece a modo de pequeños jirones en el margen del sombrero. Su carne es blanca y se colorea al corte de un rosa muy débil sobre todo en la parte superior del pie.
Habita en prados de diente y praderas donde a pastado el ganado, al tratarse de un especie nitrófila y necesitar del estiércol para su crecimiento. Fructifica también en jardines de césped muy abonado.
Es un excelente comestible. Para la mayoría de autores de una calidad inferior al A. arvensis, aunque a mí me gusta más este.

Agaricus xanthodermus:

Sombrero de 5 a 15 cm, con la parte superior típicamente aplanada y margen un poco lobulado, sedoso, blanco, gris crema que se torna rápidamente amarillo vivo donde a sido dañado. Cutícula separable hasta el centro, mate. Láminas blancas, pálidas luego de color carne vivo y finalmente pardo negras. Pie bulboso, hueco que se curva hacia la base, amarillea mucho en la base al corte y huele mal. Tiene un anillo con un círculo de dientes toscos, doble, persistente y membranoso. La carne es blanca, un poco rosa en la cabeza y amarillo cromo en la base del pie.Tiene un olor desagradable.
Es una especie nitrófila que fructifica en parques, pastizales y bordes de caminos.
Se trata de una especie tóxica que produce trastornos gastrointestinales, aunque se han dado casos de personas que la han consumido sin resultarles indigesta.

Agaricus sylvaticus:

Sombrero de 4 a 9 cm, de globoso-convexo a aplanado, margen excedente. Cutícula pardo-rojiza con escamas más apretadas hacia la zona central donde forma un disco. Láminas libres, de rosáceas de joven a negras en la madurez. Su pie está engrosado en la base y es blanquecino, finamente escamoso por debajo del anillo. Su anillo es súpero y colgante, blanquecino. Tiene una carne blanca que al corte o al roce se vuelve de color rojo.
Habita sobre todo en bosques de robles, siendo menos habitual en bosques de coníferas.
Es un buen comestible.


Estos son algunos de los champiñones más conocidos y característicos de nuestra comarca, aunque no son los únicos, a continuación voy a poner las fotos de algunas otras especies que también podemos observar en nuestros montes:

Agaricus porphyrizon
Agaricus bisporus

Agaricus urinascens 
Agaricus litoralis

Agaricus augustus
Agaricus bitorquis




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