INTOXICACIÓN FALOIDIANA
Este tipo de intoxicación está causada por una sustancia denominada amanitotoxina, y podemos desglosarlas en las siguientes familias:
-Amatoxinas (amanitinas a, b y g): son las responsables de las intoxicaciones humanas y son absorbidas en el tubo digestivo. Estas toxinas no se destruyen por la desecación y ni siquiera durante la cocción.
-Falolisina: esta toxina destruye los glóbulos rojos den la sangre, pero es destruida por los jugos gástricos de estómago y por lo tanto no puede afectarnos.
-Falotoxinas: tampoco pueden ser absorbidas por el organismo y por tanto tampoco es causa de intoxicación humana.
-Virotoxinas: tampoco actúan por vía oral, por lo que son inocuas. Son exclusivas de Amanita virosa.
El periodo de incubación suele ser de 8 a 24 horas. La intoxicación faloidiana consta de tres fases: intestinal, de mejoría aparente y de lesión hepática.
-Fase intestinal: durante esta fase los síntomas son malestar, dolor abdominal, gastroenteritis, diarrea y vómitos. Esta primera fase puede ser causa de muerte (paro cardíaco o shock vascular) si la persona intoxicada no se pone en tratamiento.
-Fase de mejoría aparente: aproximadamente a los dos días de la ingestión de las setas los síntomas desaparecen durante algunas horas, lo cual puede hacer pensar a la persona que está fuera de peligro, aunque no es así.
-Fase de lesión hepática: es la fase más grave y aparece hacia el tercer día de la ingestión. En esta fase las toxinas atacan el hígado y aproximadamente una semana después de la intoxicación y debido a hemorragias internas o coma hepático se produce la muerte.
Durante los dos primeros días: diuresis forzada, aspiración digestiva, carbón activado, catárticos, penicilina, silimarina. A los cuatro o cinco días: lactulosa, descontaminación intestinal, vitamina K, plasma fresco. A partir de entonces sólo nos salvaría un trasplante de hígado.
- Algunas especies causantes de la intoxicación faloidiana:
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| Amanita phalloides |
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| Amanita virosa |
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| Conocybe filaris |
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| Galerina marginata |
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| Lepiota brunneoincarnata |
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| Lepiota castanea |
INTOXICACIÓN ORELLÁNICA
-Orellanina: no se elimina durante la cocción y es la responsable de este tipo de intoxicación
-Cortinarinas (A,B y C): estas toxinas son de naturaleza ciclopeptídica. La cortinarina A pasa a cortinarina B (la más tóxica en el hígado) La cortinarina C es inocua para el ser humano.
Lo más llamativo de esta intoxicación es su larguísimo periodo de latencia, de dos a quince días. Esta incubación sin síntomas puede llevarnos a consumir repetidas veces la misma seta.
Predominan las manifestaciones renales. Aparece sed intensa, boca seca, poliuria, diarrea y vómitos. Hay dolores por todo el cuerpo, escalofríos y gran cansancio general.
Como en el caso de la intoxicación faloidiana hay una cierta mejoría tras la que viene una grave recaída por afección grave del riñón, con insuficiencia renal (en algún caso irreversible), vómitos, oliguria, edemas e incluso trastornos neurológicos.
Los fallecimientos suelen producirse por insuficiencia renal grave.
No se conocen antídotos específicos para este tipo de intoxicación.
El tratamiento comprende medidas sintomáticas y de soporte, rehidratación y plasmaféresis.
En el momento que la intoxicación orellánica evolucione hacia una insuficiencia renal, solo nos quedan dos opciones: la hemodiálisis, y si no es suficiente, el trasplante de riñón.
- Algunas especies causantes de la intoxicación orellánica:
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| Cortinarius cinnamomeus |
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| Cortinarius cotoneus |
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| Cortinarius rubellus |
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| Cortinarius orellanus |
INTOXICACIÓN GIROMITRÍNICA
Existen más de diez hidracinas distintas en las setas que causan la intoxicación giromitrínica, y la más abundante es la giromitrina.
La giromitrina, mediante la hidrólisis, se transforma en el organismo en monometilhidracina, sustancia tóxica con capacidad hemolítica y cancerígena.
La consumición sucesiva de pequeñas cantidades de setas que contengan giromitrina llega a ser tóxica, debido a que las dosis son acumulativas.
Tradicionalmente se han consumido ejemplares secos y tras una prolongada cocción, una vez retirada el agua. Hoy en día, se sabe que las toxinas permanecen activas y en cantidades apreciables incluso en esas condiciones, por lo que no deben consumirse jamás.
La incubación dura de 6 a 24 horas.
Sus síntomas recuerdan a los de la intoxicación faloidiana o a los de una fuerte reacción alérgica.
Los primeros trastornos se presentan con náuseas, diarreas y vómitos, seguidos de deshidratación, hipotensión y alteraciones del ritmo cardíaco. En casos graves hay trastornos nerviosos y alteración hepática y del bazo.
Se trata de una afección cardiocirculatoria, neurológica, hepática y renal, produciéndose en algunos casos la destrucción de los glóbulos rojos de la sangre.
Es posible la muerte a los dos o cuatro días de la intoxicación debido a insuficiencia circulatoria o parada respiratoria.
Además del tratamiento sintomático y de soporte, se aconseja, como antídoto de las hidracinas, vitamina B6 (piridoxina) por vía intravenosa. Con el fin de proteger la función renal, se recomienda la aportación abundante de líquidos en el caso de que la hemólisis sea muy intensa.
- Algunas especies causantes de la intoxicación giromitrínica:
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| Gyromitra esculenta |
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| Gyromitra esculenta |
INTOXICACIÓN POR PAXILLUS INVOLUTUS
No se conocen en la actualidad, pero se considera como toxina responsable de la intoxicación a la involutina y a la seta causante Paxillus involutus.
Confunde el hecho de que algunas personas han consumido esta seta previa cocción y no se han visto afectadas por ella. De hecho hasta hace pocos años, el Paxillus involutus se consideraba una seta comestible, pero el hecho de que haya causado varias muertes en Europa ha llevado a países como Alemania a prohibir su venta.
En el caso de consumir las setas crudas o con poca cocción, se producirá una pequeña hemólisis, pero tras la ingestión repetida del Paxillus involutus se produce una hemólisis grave, que puede llegar a ser mortal.
El período de incubación dura de media hora hasta tres-cuatro horas después de la ingestión, con síntomas parecidos a los de una intoxicación giromitrínica.
Aparecen dolores abdominales, diarrea, vómitos, sudores, fatiga y frío en brazos y piernas.
En los casos graves de hemólisis: intensa pigmentación en la orina, hipotensión grave, dolor lumbar, oligoanuria posterior y colapso, pudiéndose llegar incluso a la insuficiencia renal.
Es frecuente que la persona intoxicada, siguiendo un tratamiento adecuado, se recupere al cabo de siete días; sólo en los casos de hemólisis grave puede llegar a ser mortal.
El tratamiento debe ser sintomático y de soporte. Se recomienda el uso de corticoides, y siempre y cuando parezca adecuado teniendo en cuenta el tiempo transcurrido y la cantidad ingerida de setas, un lavado gástrico o intestinal.
Por otro lado, es fundamental una diuresis forzada (aporte abundante de líquidos)para evitar daños renales a la hora de eliminar restos hemoglobínicos.
Con el fin de retirar del aparato circulatorio los anticuerpos causantes de la intoxicación, es muy recomendable la plasmaféresis en los casos más graves de hemólisis inmunitaria.
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| Paxillus involutus |
TRASTORNOS GASTROINTESTINALES
Para algunas especies no se conocen todavía las sustancias que causan la intoxicación, pero en algunas de ellas se han aislado compuestos que intervienen en este tipo de trastornos gastrointestinales:
-Bolesatina, presente en Boletus satanas.
-Fasciculoles (E y F), presentes en Hypholoma fasciculare e Hypholoma sublateritium.
-Fenol, presente en Agaricus xanthodermus.
-Hebelósidos (A, B y C), presentes en especies del género Hebeloma.
-Iludinas (S y M) y Subiludinas, presentes en Omphalotus olearius y Omphalotus illudens.
-Sesquiterpenos cíclicos, presentes en muchos Lactarius.
-Vinilglicina, presente en Entoloma lividum.
Entre la media hora y las cuatro horas después de la ingestión de las setas.
Los síntomas se manifiestan con náuseas, malestar y vómitos, acompañados en ocasiones de dolores abdominales y diarrea. debido a la pérdida importante de líquidos, la única complicación que puede surgir es la deshidratación, por ello, es necesario tratarla desde el principio. La respuesta personal en este tipo de intoxicaciones es muy variada, desde un simple dolor, cólico y molestias, hasta graves cuadros de diarrea y deshidratación. Por lo general, este tipo de intoxicaciones suelen desaparecer a los dos días.
Aunque algunas especies pueden provocar intoxicaciones más graves:
-La Entoloma lividum, es el más grave de todos, dando lugar alguna vez a graves lesiones hepáticas y alteraciones nerviosas, con gran debilidad en el período de convalecencia. Es incluso mortal en algunas ocasiones.
-En Omphalotus olearius predominan los vértigos, mareos, parestesias, lipotimias y relajación muscular.
-La Tricholoma pardinum es también muy peligrosa y causante de lesiones hepáticas, uremia, shock y hemorragias digestivas.
Sintomático y de soporte. Debido a los vómitos, normalmente no es necesario el lavado de estómago o intestinal. En los casos más graves hay que evitar la deshidratación con un tratamiento adecuado.
En todo caso, es recomendable mantenerse en observación debido a la posibilidad de haber ingerido otra especie que produzca una intoxicación más grave y no haya sido evacuada totalmente del organismo mediante las diarreas y los vómitos.
- Algunas especies causantes de trastornos gastrointestinales:
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| Boletus satanas |
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| Entoloma lividum |
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| Agaricus xanthodermus |
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| Russula emetica |
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| Omphalotus olearius |
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| Hypholoma fasciculare |
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| Lactarius torminosus |
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| Macrolepiota venenata |
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| Ramaria formosa |
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| Tricholoma pardinum |
INTOXICACIÓN SUDORIANA O MUSCARÍNICA
La toxina responsable es la muscarina. Su nombre deriva de su descubrimiento, ya que esta toxina fue encontrada en la Amanita muscaria, pero, en realidad, la concentración de muscarina en esta seta es muy baja.
Su incubación es muy breve, los primeros síntomas aparecen entre los veinte minutos y las dos horas siguientes a la ingestión.
Comienzan con un aumento de todas las secreciones del organismo: sudoración abundante ( de ahí intoxicación sudoriana), lagrimeo, salivación, goteo nasal. Seguidamente se dan síntomas digestivos: diarreas, náuseas, vómitos, dolor de vientre.
Además también se presenta visión borrosa o doble. Es posible la deshidratación y se puede llegar incluso a tener convulsiones y dificultades respiratorias.
La intoxicación raramente es grave, excepto en algunos casos debidos a Inocybe patouillardii y Clitocybe dealbata que han llegado a producir la muerte.
En principio sintomático: con un lavado de estómago, si se considera oportuno, y una rehidratación, debido a al enorme sudoración, vómitos y diarrea que pueden llegar a deshidratar al intoxicado.
- Algunas especies causantes de la intoxicación sudoriana:
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| Clitocybe dealbata |
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| Clitocybe rivulosa |
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| Inocybe geophylla |
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| Inocybe lacera |
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| Inocybe patouillardi |
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| Inocybe rimosa |
INTERACCIÓN CON EL ALCOHOL (Síndrome coprínico)
La sustancia responsable se denomina coprina. La coprina, que es una combinación del aminoácido glutamina con un derivado de la ciclopropanona, interfiere con el metabolismo oxidativo del etanol provocando la acumulación de acetaldehído en el organismo.
A los 30 minutos de ingerir las setas. Es necesaria la consumición de alcohol, aproximadamente entre 5-10 mg/100.
Los síntomas duran cerca de dos horas y pueden repetirse siempre que se tomen bebidas alcohólicas durante unos días.
Los síntomas típicos son: rubrefacción cutánea (cara, cuello, pecho y extremidades), sofocos, palpitaciones, pinchazos y angustia respiratoria. Son posibles también las náuseas y vómitos, presentándose de forma variable, sabor metálico, diarrea, sudoración, arritmias y disritmias cardíacas, vértigos y alteraciones de la visión. En casos muy raros se pueden llegar a producir lesiones hepáticas o renales.
Los síntomas también se presentan si el alcohol fue consumido con una anterioridad de cuatro horas a la comida, o si su consumo es posterior (incluso hasta los cuatro días).
Los síntomas pueden ser muy leves o llegar a no producirse, según el nivel de alcohol en sangre.
Las intoxicaciones más graves se refieren a Coprinus atramentarius, el resto de las especies únicamente producen angustias y vómitos.
Ante todo, la supresión de las bebidas alcohólicas y no ingerirlas con las especies causantes de este síndrome.
Medidas de soporte y sintomáticas, como la rehidratación. Es muy recomendable, como factor redox, la vitamina C a dosis altas por vía intravenosa. Por otro lado, y debido a los vómitos, no suele ser preciso el lavado gástrico.
- Algunas especies que interaccionan con el alcohol:
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| Coprinus atramentarius |
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| Boletus luridus |
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| Clitocybe clavipes |
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| Laetiporus sulphureus |
TRASTORNOS MENTALES (Predominio de trastornos nerviosos)
Las sustancias responsables de la intoxicación son: ácido iboténico, muscinol (la más potente) y muscazona. Estas sustancias son derivados ixozálicos que actúan como falsos neurotransmisores.
También se encuentra como sustancia responsable la panterinina, pero solamente está presente en la Amanita pantherina.
El período de incubación comprende desde la media hora a las tres horas después de la ingestión de las setas.
Suelen ser muy variables, debido no sólo a la cantidad ingerida de tóxicos, sino también a la reacción personal del consumidor y a la presencia de otras sustancias activas, que varían dependiendo de las zonas donde se recojan las setas, de las variedades y de las formas de conservación y preparación.
Son frecuentes los trastornos gastrointestinales y motrices como: náuseas, vómitos, vértigos, descoordinación parecida al estado de embriaguez, agitación, dilatación anormal de la pupila y en ocasiones enrojecimiento de la piel y taquicardia.
Lo más típico, sin embargo, es la presencia de síntomas neurológicos, con desorden mental, euforia, dificultad de coordinación y de habla, estado de embriaguez, agresividad, alucinaciones y confusión mental.
La intoxicación por grandes dosis puede llegar a ser mortal. Normalmente, las alteraciones no duran más de un día y acaban con un sueño profundo más o menos reparador.
La intoxicación más grave es la producida por la Amanita pantherina, que, aunque rara vez, puede llegar a ser mortal.
Debe ser sintomático y de soporte. Se recomienda la posible eliminación de restos de setas del aparato digestivo mediante lavado de estómago, pero es mucho más útil la diuresis forzada.
Al producirse unas alteraciones nerviosas tan cambiantes, es precisa una vigilancia estrecha de la persona intoxicada.
- Especies causantes de esta intoxicación:
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| Amanita muscaria |
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| Amanita pantherina |
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| Amanita gemmata |
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| Amanita regalis |
TRASTORNOS MENTALES (Predominio alucinógeno)
Las sustancias causantes de estas intoxicaciones alucinógenas, que actúan como falsos neurotransmisores, se denominan: psilocibina, psilocina, baeocystina y norbaeocystina. Sólo la primera parece tener verdadero efecto alucinógeno, siendo las otras tres precursores más o menos inestables de la psilocibina.
Son sustancias hidrosolubles, desaparecen con el agua de la cocción, pero no con la desecación.
Entre los treinta minutos y las dos horas después de la ingestión.
Presentan alteraciones sensoriales, pulso lento, tensión baja, visión borrosa, dilatación de las pupilas, sudoración, debilidad y mareos; presenta escasos síntomas digestivos.
Alucinaciones, visiones, desorientación, taquicardia, trastornos mentales, agresividad, pérdida de control, euforia, ansiedad, risas involuntarias, bienestar... Tanto las alucinaciones como los cambios de comportamiento dependen del estado de ánimo y de la personalidad del intoxicado.
Los síntomas desaparecen entre las tres y las nueve horas siguientes a la ingestión, sin secuelas, salvo en los niños pequeños, a los que les puede provocar la muerte.
El tratamiento es sintomático y de soporte. No suele ser precisa la eliminación de restos de setas en el aparato digestivo. Se deben administrar sedantes. La persona intoxicada no se debe quedar sola, necesita alguien que lo tranquilice. Por otro lado, se deben evitar los estímulos sensoriales.
- Algunas especies causantes de estos trastornos:
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| Pholiota squarrosa |
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| Gymnopilus spectabilis |
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| Psilocybe semilanceata |
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| Mycena pura |
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| Panaeolus fimicola |
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